La red de abastecimiento de agua de la ciudad de Washington, en Estados Unidos, data de antes de la Guerra de Secesión norteamericana. Hoy en día, sin embargo, estas mismas infraestructuras son unas de las más modernas del mundo. Las cañerías tienen ahora sensores para analizar los datos procedentes de las válvulas o los sumideros, optimizando costes y agilizando el trabajo.Esto es representativo de una tendencia que vemos en diferentes entornos. En el evento Parallels Summit, el debate se concentró en cómo alcanzar el máximo rendimiento de los centro de datos. Una de las propuestas fue la de optimizar los servidores para proporcionar más espacio virtual. Y esto tiene que ver con encontrar nuevos espacios en un mundo construido hace tiempo.
No podemos permitirnos reemplazar nuestras autopistas o aeropuertos ni los edificios en los que vivimos y trabajamos. En cambio, sí podemos optimizar su infraestructura física, creando un espacio virtual que nos proporciona formas para que los sistemas actuales sean mejorados.
En estos nuevos espacios remodelados tiene una gran importancia la ubicuidad de los sensores. Éstos se encuentran en objetos físicos, como la red de abastecimiento de agua. Otras tecnologías destacadas son las etiquetas RFID y las redes 4G. Todos los datos generados de esta manera los podemos leer ahora más fácilmente. La gente tiene tablets y smartphones para gestionar toda la cantidad de información que les llegue.
Concretamente, la red de abastecimiento de agua de Washington obtiene algunos beneficios gracias a la tecnología de los sensores:
- Los camiones que realizan un servicio público pueden ser automáticamente conducidos a determinados lugares para optimizar la gestión del trabajo. Se están comprobando tasas del 20% de ahorro de combustible.
- Otro ahorro de costes proviene de conocer, gracias a los análisis, si un contador de agua se está deteriorando. Así se pueden identificar y reemplazar estos contadores de forma más efectiva.
- Los análisis predictivos ayudan a programar la sustitución de infraestructura antigua para prevenir incidentes costosos que reducen la calidad del servicio.
Este es un ejemplo de cómo se pueden optimizar los espacios, tanto físicos como virtuales, con el objetivo de crear mejores sistemas. De esta manera se pueden conservar infraestructuras antiguas con sustanciales mejoras gracias a la tecnología actual.
