El estudio, encargado por Google a la consultora Millward Brown, recoge la opinión de 2.700 ejecutivos de empresas que utilizan tecnología a diario, 300 de ellos españoles. Y viene a confirmar, como señaló en la presentación de los resultados la profesora de IESE Sandra Sieber, que los gigantes de la tecnología son hoy los que trabajan en primer lugar para los usuarios: Google, Facebook, Amazon y Apple, seguidos de Twitter y Paypal; frente a los colosos de comienzos de siglo -Microsoft, HP, Intel...- orientados sobre todo hacia las empresas. El inversor ha demostrado con su respaldo a Facebook que también cree en que es mucho más que una web para compartir comentarios con amigos. Y Google pretende dar un paso adelante con su Google+ de corte profesional.
"Es algo natural para compañías que, como la nuestra, tienen gente en Colombia o Argentina", explica Adolfo Corujo, que desde su departamento de comunicación online de Llorente & Cuenca, pionero en España, se encarga de las políticas de participación de empleados en internet de numerosos clientes. "El uso de redes sociales, además, muestra la evolución de la empresa: antes era un castillo, con una torre al mando y dificultades para entrar o salir; hoy el castillo es de arena, todos pueden hablar y las barreras se mueven con las olas de unas mareas que van a ser cada vez más difíciles de controlar".
Es interesante, con todo, que "los señores de la torre", por proseguir con la analogía, parezcan los más dispuestos a ajustarse a los nuevos tiempos. Según los datos de Google, el 71% de los altos ejecutivos utiliza herramientas sociales en el trabajo al menos una vez a la semana, por el 49% de los trabajadores de menor perfil. "Por lo que he hablado con bastantes de ellos, los consejeros delegados del Ibex 35 tienen claro el valor de las redes sociales en su empresa", explica Niels-Christian Krüger, responsable del negocio para empresas de Google en España y Portugal. "A partir de ahí se generará un efecto cascada para generalizar su uso", apunta la profesora Sieber. Otro dato no menos interesante es el de que el uso de redes sociales suponga una ayuda decisiva para el éxito. Así, el 81% de las firmas encuestadas que tuvieron el pasado año un crecimiento interanual superior al 10% considera que el empleo de estas herramientas les ayudó a crecer.
Y el 80% de ellas las usan, entre otras cosas, para mejorar la colaboración y la forma de compartir información entre los equipos. Entre las ventajas citadas por los encuestados se cuentan la posibilidad de aunar ideas con equipos dispersos (79%), el incremento de la productividad (76%) y la posibilidad de encontrar información, personas o personal cualificado con más rapidez (72%).
Un detalle importante es que, en países donde no existen los problemas de desempleo que padece España, la posibilidad de usar estas herramientas supone también un elemento de atracción para el talento. Porque los usuarios no creen en empresas cerradas que recorten el acceso a las redes sociales y, a su vez, los usuarios frecuentes suelen ser empleados de éxito. Siempre según la encuesta de Google, el 86% de los usuarios frecuentes de redes sociales han sido ascendidos recientemente, y tienen más del doble de posibilidades de trabajar en empresas con un alto nivel de crecimiento en comparación con los empleados que no las utilizan.
Los datos también apuntan a que el optimismo sobre el valor de las redes sociales es más alto en España y Europa que en los otros países del estudio -Alemania, Gran Bretaña, Francia, Holanda o Suecia-. Según la profesora Sieber, "es lógico que países en crisis miren a las novedades con buenas expectativas. Y, por otra parte, las redes sociales vienen a cubrir una necesidad de comunicación continua que es bastante más importante para los mediterráneos que para otros europeos".
Para el empleado queda la labor de definir la frontera entre su perfil social personal y el laboral. Aunque expertos como Adolfo Corujo creen que hay que asumir que "podemos tener diferentes marcas personales, pero solo una reputación. Reconocerse activo en un ámbito especializado de ocio ya no tiene por qué ser una dificultad, sino al contrario: da la impresión de una persona de amplios intereses y con una empresa empleadora que deja margen para su vida personal".
Fuente: http://www.cincodias.com/articulo/directivos/jefes-abren-camino-redes-sociales/20120519cdscdidir_1/